La niña que cenaba con Borges

 

Cuando era niña, a la casa de Luisa Valenzuela solía llegar Jorge Luis Borges. Por entonces no era el Borges que conocemos, sino un autor que se reconocía a sí mismo como un escritor para escritores. Era amigo de su madre, la también escritora Luisa Mercedes Levinson, con quien alguna vez hizo un cuento a cuatro manos. Del estudio donde producían aquel cuento —recuerda Luisa— se escuchaban muchas risas, y luego, en la mesa, Borges decía: «Hoy hemos avanzado muchísimo. Logramos terminar una línea».

Es un recuerdo que Valenzuela ha contado en varias entrevistas —aunque no particularmente en la que incluimos en esta edición—, y da cuenta de un interés por la concisión. La escritora, que llegó a Guayaquil para participar en la edición de la Feria Internacional del Libro 2017 (FIL), considera que el cuento es más representativo de la prosa que la propia novela, un género que permite al autor irse por las ramas. Con muchos años de periodismo a cuestas, Valenzuela aprecia la precisión que le exige un relato corto.

Después de todo, Argentina —la nación invitada a esta edición de la FIL— «es un país de cuentistas», dice Valenzuela, que empieza a enumerar a Bioy Casares, a Silvina Ocampo o a Julio Cortázar.

La FIL ha traído a otros autores igual de interesantes: el cubano Leonardo Padura, premio Princesa de Asturias 2015, la argentina Selva Almada, el colombiano Juan Camilo Rincón, y el español Álex Grijelmo, que ha sido recibido en Guayaquil como un rockstar de la academia (por extrañas que suenen juntas estas dos palabras). Los bolivianos Edmundo Paz Soldán y Liliana Colanzi no pudieron llegar por causa del huracán Irma. También participó el colombiano Juan Gabriel Vásquez, quien para este número nos concedió una entrevista en la que habla sobre cómo tratar a los suburbios en la literatura.

Nuestra edición 306 incluye además una aproximación al trabajo del narrador y poeta ecuatoriano Huilo Ruales; un obituario de Mama Zoilita, la reina de la bomba; un perfil de Javier Gavilanes, artista ganador de la última edición del salón de Julio; un ensayo acerca del libro Alfonso Reyes y el Ecuador; la historia de Robert Johnson, un músico del que se dijo que había hecho un pacto con el diablo, y una nueva entrega de Escritor lector, de Ernesto Carrión, que habla esta vez del poemario Atar a la rata, de Esteban Mayorga.